Review - El Corredor Nocturno

El Corredor Nocturno es un poco dificil de calificar, no puedo decir simplemente que es una buena película, porque aunque la disfruté creo que tiene algunas falencias que le quitan mérito. Eso no significa tampoco que no me haya gustado, pero lo pensaría dos veces antes de recomendarla.

La historia trata sobre Eduardo López (Leonardo Sbaraglia) , un gerente de una multinacional que vive preocupado por su trabajo y descuida a su familia. Un día Eduardo se encuentra con una persona a la que había visto muchas veces pero con la que nunca había trabado relación, Raimundo Conti (Miguel Ángel Solá). Pronto queda claro que Conti persigue otro propósito más allá de una amistad, y se convierte en un personaje peligroso que le hace la vida imposible a Eduardo y a su familia.

Las actuaciones son muy buenas, por sobre todo Solá en el papel de Conti, pero Sbaraglia y Erica Rivas (quién interpreta a su mujer) también están muy bien. La historia me mantuvo atrapado desde el principio hasta el final, pero ya cerca del desenlace comenzó a molestarme la falta de definiciones. El final tiene mucha importancia y es bueno, sin embargo hay cosas que me parece que quedan sin explicación, y este es el principal punto por el que me cuesta tanto definirme sobre la película.

Después de verla me quedé pensando bastante y discutiendo con otras personas que la vieron conmigo, y cuando uno recuerda ciertas escenas ya sabiendo como termina se da cuenta de que hay ciertos elementos que están muy bien utilizados. Por el contrario, hay otras cosas que no terminan de cerrar y esto es un tanto molesto, ya que si bien el punto central queda bien claro, me parece que el guión falla al transmitir la historia en su totalidad (aunque admito que puede ser una falencia de los espectadores).

El filme está basado en el libro homónimo del autor uruguayo Hugo Burel y realmente después de verla me dieron ganas de leerlo para aclarar algunos puntos y poder terminar de definir si la falla está en la historia o en la adaptación a la pantalla grande.

Personalmente la película la disfruté bastante y si bien cuando terminó me quedó una sensación extraña, me dejó pensando por un par de días en ciertas cosas y eso creo que es algo bueno.